Presentación del Presidente

Presentación del Presidente
Javier González de Lara y Sarria
Un 45 Aniversario de reafirmación de la unidad empresarial
A lo largo de los años la Confederación de Empresarios de Andalucía ha ido adquiriendo los rasgos propios de la madurez de las organizaciones: liderazgo, participación, reconocimiento, reputación e independencia.
No ha sido un camino fácil, pero estos 45 años de historia nos han permitido consolidar un modelo de organización fiel a sus principios, leal con sus miembros y absolutamente abierta a la sociedad andaluza.
Partimos de una base asociativa tremendamente variada, tanto en territorios, como en tamaños o formas jurídicas. Una heterogeneidad tan amplia que requiere de una gobernanza firme y bien articulada, basada en conceptos como la confianza y la unidad empresarial.
Celebramos nuestro 45 aniversario con unos cimientos éticos y morales muy firmes, con un modelo de organización consolidado y con un objetivo común absolutamente compartido por todos: la defensa de la empresa como motor que es de la sociedad, y en este sentido, 2024 ha sido un año realmente fructífero.
Por una parte, hemos afianzado en un muy breve período de tiempo, la celebración del 28 de octubre como el Día de la Empresa en Andalucía. Hemos patrimonializado este evento promocional, que por derecho propio ya pertenece a CEA y a sus organizaciones miembros.
Por otra parte, hemos reforzado nuestra interlocución con la Administración de la Junta de Andalucía, a través de la aprobación de la ley de participación institucional, que nos reconoce, con rango de ley, los derechos y obligaciones que tenemos como organización empresarial más representativa en el ámbito de la Comunidad Autónoma de Andalucía.
Con ambos hitos hemos desarrollado tanto nuestra interlocución interna, como externa, generando una capacidad de acción que es el resultado de muchos años de trabajo y esfuerzo, de una intensa interlocución y diálogo. Todo ello sobre una base que es fundamental y que nunca podemos perder: la unidad de acción empresarial.
Una unidad que tenemos que seguir cultivando día a día, siendo conscientes que es nuestra mayor fortaleza y hecho diferencial.
Una unidad que también tiene su efecto positivo en la sostenibilidad de la organización, que un año más reporta datos positivos, no sólo de gestión institucional, sino también económica.
No obstante, asistimos con cierto estupor a decisiones políticas que tratan de menoscabar esa unidad y de desacreditar instrumentos tan útiles como el diálogo social, que en muchas ocasiones se pretende sustituir por un modelo de monólogo social afín a otros intereses.
Esta realidad conlleva un gran riesgo, pues trata de distorsionar el mercado de trabajo en España, promueve barreras y trabas a las empresas, generando un entorno de inestabilidad normativa y falta de certeza económica.
Desde las organizaciones empresariales tenemos que seguir revelándonos ante este tipo de propuestas con el fin de agotar el diálogo en su máxima expresión.
Somos una organización basada precisamente en el diálogo y en la participación, orientada a la construcción y el crecimiento, constituida libre y democráticamente, independiente y voluntaria.
Nuestra labor, esbozada en esta memoria de actividades, refleja los resultados obtenidos, las interlocuciones desarrolladas, las actividades organizadas y, en general, todo aquello que tiene que ver con nuestra vocación representativa.
Una acción especialmente reivindicativa a lo largo de años, porque nuestra naturaleza es proactiva, generando ideas y propuestas para mejorar nuestra sociedad desde el punto de vista de la empresa.
En este período, por ejemplo, hemos impulsado medidas en favor de la juventud y el empleo, conscientes de su impacto social. Hemos trabajado por la industrialización de nuestra economía, por la sostenibilidad del sector turístico o por el incremento de recursos en materia de agua. Hemos acompañado a nuestras empresas en sus conquistas internacionales, hemos tratado de buscar mecanismos de financiación y de defender siempre nuestra principal marca, Andalucía y su idoneidad como territorio para la inversión.
Mantenemos un diálogo constante con la sociedad, con las entidades financieras y colegios profesionales, con partidos políticos y sindicatos, con el municipalismo andaluz, con los representantes electos en el Parlamento de Andalucía. Dialogamos y consensuamos, porque poco hay más fructífero y creíble, que el apretón de manos que simboliza un acuerdo.
Somos la voz y representación de las empresas, para que éstas puedan seguir liderando el futuro, para que Andalucía continúe su camino en positivo.
Javier González de Lara y Sarria
Presidente, Confederación de Empresarios de Andalucía